La columna vertebral de un negocio es que tus clientes regresen, para eso debes tener una comunicación excelente con ellos y darles siempre lo que necesitan; puede que pasen muchos años y se creen nuevas tecnologías, pero la publicidad que se pasa de boca en boca siempre es la más confiable. Entonces, ¿cómo se logra esto? De la siguiente manera:
Conoce, analiza y vencerás. Intenta hacer que el cliente hable de él, que te diga lo que le gusta, qué cosas le motivan y qué es lo que espera del producto o servicio que le estás brindando: puedes hacerle preguntas o dejar que te dé sus opiniones, de cualquier manera es importante escucharlas todas.
Conoce, analiza y vencerás. Intenta hacer que el cliente hable de él, que te diga lo que le gusta, qué cosas le motivan y qué es lo que espera del producto o servicio que le estás brindando: puedes hacerle preguntas o dejar que te dé sus opiniones, de cualquier manera es importante escucharlas todas.
Selecciona la forma de venderles a tus compradores. Básicamente se puede hacer de dos formas, indirecta y directa; en la primera, puedes interesarte en tu cliente y preguntarle por su trabajo, la familia, el clima, entre muchas cosas; pero, poco a poco tendrás que irle mencionando los beneficios de tu producto, esto puede funcionar muy bien con personas retraídas e indecisas. En la segunda, entras al tema eficientemente resaltando lo mejor de lo que ofreces para que tu cliente haga un cálculo mental y acepte; esta forma funciona con las personas que saben lo que quieren y no desean que se les quite mucho tiempo, van por algo en específico.
Capacítate y aprende de marketing. No necesitas cursos costosos ni gastarte el dinero de tu cuenta de ahorro, simplemente documéntate, investiga, pero sobre todo sé autodidacta para que cada día seas mejor vendedora y puedas aplicar técnicas diferentes; aprender de los grandes conversadores como Oprah Winfrey o Barbara Walters será tu tarea diaria.
Las acciones anteriores harán que el cliente regrese por la calidad en la atención, por el servicio en sí, cosa que es un rasgo muy distintivo en las grandes empresas: abogar por la calidez humana y el trato cordial antes de abordar un sistema de ventas agresivo que no funciona para todos es parte del enfoque moderno. Adaptarse es la clave de los buenos negocios, es lo que debes recordar cuando trates con tus consumidores, ya que de ello dependerá tu éxito.